La leyenda del dragón del patriarca
¿Conoces una de las leyendas más famosas de Valencia?¿Sabes dónde encontrar el caimán del patriarca? ¡Ven corriendo a descubrirlo!
Hoy quiero hablarte de una leyenda muy curiosa que forma parte de la Historia de Valencia: la leyenda del dragón del patriarca.
Si caminas por la calle Universitat, donde se sitúa el gran edificio de la Nau, encontrarás el Real Colegio Seminario del Corpus Christi, también conocido como la Iglesia del Patriarca en referencia al Patriarca San Juan de la Ribera, y si te animas a entrar dentro, verás los restos de una temible bestia que protagonizó una historia en el pasado. ¿Quieres conocer cuál fue?
Se dice que en el río Turia había un terrible caimán o dragón que atacaba a los valencianos que se acercaban, con lo cual, ante el gran miedo de ser devorados o desmembrados por una bestia, nadie se atrevía a acercarse y no podían disfrutar de este importantísimo río de Valencia.
Un día, un valiente joven quiso terminar con esta amenaza y decidió enfrentarse a él, utilizando para ello un ingenioso traje hecho de espejos que él mismo se había construido.
A partir de aquí existen dos versiones sobre cómo el traje hizo efecto en el dragón: unos se decantan porque se debe al gran destello que enviaban los espejos pero otros achacan la causa a que el dragón se quedó hipnotizado con la visión de su imagen reflejada en ellos, lo que le dio tiempo al joven héroe de lanzarle una gran lanza que le causó la muerte.
¿Sabías que las madres españolas utilizaban a este caimán para asustar a sus hijos?
A raíz de la leyenda, se creó el dicho popular “si parleu, a la pancha vindreu”, es decir, “si habláis, a la barriga vendréis” y las madres de todos los tiempos han utilizado este dicho como amenaza para conseguir que sus hijos se mantuvieran en silencio durante todas las celebraciones de la iglesia del Patriarca.
Ante el miedo de ser devorados por el hambriento caimán que se encuentra en la pared, los niños permanecían sin decir ni mu durante todo el acto.
Lo cierto es que si consultamos los archivos del Patriarca, descubriremos que este caimán es un regalo enviado por el Virrey de Perú, el marqués de Monterrey, a San Juan de la Ribera.
El caimán, cuyo nombre era Lepanto en referencia a la famosa batalla, vivió hasta el año 1606 cuando fue disecado y colgado en el templo para pedir silencio.
No obstante, que la leyenda no sea cierta y existan pruebas de ello, no le quita ningún valor pues su origen se encuentra nada más y nada menos que registrada en un cuento del gran escritor valenciano Vicente Blasco Ibáñez, publicado en el diario Pueblo el 6 de enero de 1901 con el nombre de “El dragón del Patriarca”.
Este cuento dota a la leyenda de increíbles detalles y símbolos que tienen relación con la masonería, pues su célebre autor pertenecía a esta institución.
Espero que esta historia te haya gustado y ahora tengas muchas ganas de descubrir más y más leyendas de nuestra preciosa ciudad.
Si quieres visitar la maravillosa iglesia del Patriarca, visita la página web de Hispania, escuela de español donde encontrarás divertidas e interesantes actividades para conocer mejor la ciudad de Valencia y todas sus leyendas e historias.
Artículo escrito por Rita Rodríguez Varela para Hispania, escuela de español.